La transición de gobierno en el Estado de México está en marcha y ocurre en medio de un escenario político enmarcado por las amenazas de división al interior del tricolor y la incertidumbre de los trabajadores del gobierno estatal.

J. Israel Martínez Macedo

En el Estado de México la administración de Alfredo del Mazo Maza se extingue e, incluso, para algunas figuras políticas de la entidad, su participación el día de ayer en la mañanera marca el fin de su gobierno y la oficialización del relevo de gobierno a Delfina Gómez Álvarez y Morena con el beneplácito del presidente Andrés Manuel López Obrador pese a que la transición comenzó, formalmente, una semana antes.

En el contexto de esa transición, el gobernador estuvo presente en la conferencia matutina del presidente durante la mañana del martes para informar que el Tren Interurbano Toluca-México será inaugurado en una primera etapa el penúltimo día oficial de su gobierno, el 14 de septiembre; con lo que esta obra estará parcialmente en funcionamiento a partir de esta fecha, muy lejos del 2017 cuando se había comprometido su conclusión.

El Tren Interurbano ha resultado un dolor de cabeza para cuatro administraciones: dos estatales y dos federales. Anunciado en 2012 por el entonces recién llegado presidente Enrique Peña Nieto, los trabajos comenzaron dos años después, siendo el gobernador mexiquense Eruviel Ávila Villegas; la obra parecía avanzar viento en popa, pero se encontró con el rechazo de los ejidatarios de Ocoyoacac quienes frenaron el avance de las obras al no llegar a un acuerdo por el uso de sus tierras para el paso del transporte.

El gobierno estatal no pudo y no ha podido destrabar este problema que llegó a los tribunales, mismos que le dieron la razón a los ejidatarios con lo que la obra se detuvo indefinidamente; razón por la cual, los trabajos tuvieron que ser suspendidos y la obra está si concluirse. Por esta razón es que el Tren Interurbano México-Toluca se suma a la lista de obras del sexenio lopezobradorista que se inaugurarán sin haberse terminado. El sello de la casa, al parecer.

El anuncio de la futura inauguración pinta como una concesión al gobernador para poder hacer la entrega un día antes de que concluya oficialmente su administración; un gesto de “buena voluntad” que azuza los rumores de que la derrota priísta en el Estado de México estuvo precedida por una negociación al más alto nivel, una versión que el presidente del PRI nacional se ha encargado en poner sobre la mesa y fomentar en la entidad.

De hecho, fue una jugada de Alejandro “Alito” Moreno la que retrasó el proceso de transición que el propio gobernador mexiquense había anunciado que ocurriría en cuanto el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) otorgara la Constancia de Mayoría a Delfina Gómez, declaración tras la cual se presentó el movimiento del priísmo nacional que tomó por sorpresa a más de uno en la entidad.

Pese a todo la transición ha comenzado con reuniones encabezadas por el mandatario estatal y la gobernadora electa pero no se ha sabido, al menos hasta el momento, que esto se traduzca en instrucciones a los funcionarios del gobierno mexiquense para colaborar con quienes los sustituirán ni tampoco se ha sabido de la presencia de gente vinculada a Morena acercándose a conocer el funcionamiento de la administración pública estatal.

Lo que sí ha sido visible es un proceso de transición “terso”, amigable y muy civilizado entre el gobierno saliente y el entrante; algo que incluso no se ha visto en otras entidades donde Morena ha llegado a gobernar y en los que este proceso se ha limitado a ser un paso de uno o dos días solamente sin que esto haya perjudicado, de alguna manera, el funcionamiento de las administraciones estatales en sustancia.

Pie de foto: Primera reunión de la transición entre Alfredo del Mazo y Delfina Gómez
Pie de foto: Primera reunión de la transición entre Alfredo del Mazo y Delfina Gómez

Este día continuarán las reuniones de la transición en la sede del gobierno estatal con la esperanza de conocer avances en la organización de lo que será el futuro gobierno y, también, acercarse a la realidad de la situación que se vive en la entidad y que será lo que Delfina Gómez y su equipo deberán enfrentar desde el primer día de su administración, como ellos mismos han dicho.

Alfredo del Mazo: Transición comenzará apenas concluya el proceso electoral

La transición de gobierno avanza en el Estado de México y las formas apuntan a que será un relevo tranquilo, pacífico y civilizado que le dé oportunidad del gobernador Alfredo del Mazo a salir decorosamente del palacio de gobierno mientras que para Delfina Gómez apunta a una llegada en la que no tendría ningún problema para hacerse cargo de la administración estatal, lo que se traduce en la ausencia de pretextos para entregar resultados inmediatos o en el corto plazo respecto a lo que fueron sus promesas de campaña.

Al tiempo.

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